El Ayuntamiento pide implicación institucional en el desarrollo de Plaiaundi
11.02.14 - 00:13 - :: MARÍA JOSÉ ATIENZA | IRUN
El Ayuntamiento de Irun, a través de su delegado de Medio Ambiente, Miguel Ángel Páez, ha pedido a las administraciones competentes (Gobierno Vasco y Diputación Foral de Gipuzkoa) «que reafirmen sus compromisos con el desarrollo de Parque de Plaiaundi», al igual que lo hizo el Pleno municipal el pasado 23 de diciembre. La Corporación irunesa adoptó en esa fecha, por mayoría, un acuerdo en el que se recoge «un compromiso claro de la ciudad, con vistas a que se pueda producir, por un lado, el desarrollo del Plan Especial de Txingudi y por otro, el cambio de ubicación de los equipamientos deportivos de Plaiaundi».
Sabemos los aficionados a la ornitología que los paíños son especies pelágicas, que únicamente mantienen la dependencia con tierra durante el periodo reproductor.
Es por ello que para observarlos podemos hacer dos cosas, o bien adentrarnos en su hábitat, salir a alta mar a buscarlos, o bien esperar a que los temporales los empujen a costa. De hecho, los ingleses, sabía nación, llaman a los paíños, storms petrels, petreles de las tormentas. Su nombre lo deja bien claro.
Plaiaundi celebra el Día Internacional de los Humedales con una exitosa jornada técnica en Txingudi Ekoetxea. A continuación la entrevista que el DV realiza a uno de los técnicos del Parque Ecológico de Plaiaundi, Alberto Luengo, que da un repaso a la historia de la recuperación de este humedal.
En el centro de interpretación de Plaiaundi, se va a impartir por Mikel Arrazola Arregui (Dirección de Gobierno Abierto) un curso de fotografía para todas personas interesadas en la adquisición de habilidades en relación con la fotografía de naturaleza como herramienta para el conocimiento, divulgación y sensibilización ambiental.
Han pasado veinte días hábiles de caza y el resultado hasta la fecha no puede resultar más desalentador. Tres especies protegidas, que conozcamos o hayamos recuperado nosotros, tiroteadas por los cazadores. La primera de ellas nada menos que un guión de codornices (Crex crex) al que ni siquiera se dignaron en disparar y lo golpearon con un palo en Balmaseda (Bizkaia). En Gipuzkoa una garza imperial (Ardea purpurea) recogida con un tiro en Usurbil y en Tolosa una lechuza campestre (Asio flammeus). Ojo, esto es lo recuperado, a imaginar lo que se ha perdido en el monte.